De vez en cuando me gusta sorprender a mi hijos con un postre especial, y esta tarta les vuelve locos: bizcocho, fresas y nata....¿Os animáis a hacerla??
No es demasiado laboriosa, y la receta del bizcocho es super recomendable para todo tipo de tartas, muy fácil de preparar y con tan sólo 4 ingredientes.
Ingredientes:
Para el bizcocho:
4 huevos
120 grs azúcar
120 grs harina
1 cucharadita de esencia de vainilla o el interior de una vaina de vainilla.
Para el relleno y cobertura:
500 grs de fresas
300 azúcar
500 ml nata
Vamos a empezar con el bizcocho. Necesitamos un molde de 20 o 23 cms. Lo untamos de mantequilla o papel de hornear y reservamos. Calentamos el horno a 175 ºC.
En un bol grande añadimos los 4 huevos con el azúcar y la vainilla y batimos con varillas durante 12 minutos. Después, añadimos la harina tamizada con cuidado y movimientos envolventes. Una vez mezclado, incorporamos al molde y horneamos.
-> Si el molde es de 20 cms, horneamos de 22-25 minutos.
-> Si el molde es de 23 cms, horneamos 20 minutos.
Cuando esté horneado, lo sacamos y reservamos hasta que esté frío.
Reservamos unas 8 fresas para la decoración, lavamos y cortamos el resto en trocitos muy pequeños, añadimos un chorrito de vinagre, pimienta y 3 cucharadas soperas de azúcar y dejamos macerar.
En un cazo pequeño, añadimos 150 grs de azúcar, un chorrito de sirope de fresa (para darle color) y 50 grs de agua. Dejamos hervir hasta que quede un almíbar consistente. Podemos añadir agua si lo deseamos más líquido.
Montamos la nata junto con los 150 grs de azúcar y reservamos en el frigorífico.
Una vez el bizcocho esté frío, cortamos a la mitad, repartimos el almíbar (reservando un poco para la decoración) por las dos partes interiores del bizcocho y rellenamos con las fresas cortadas que dejamos macerando (si lo queréis más jugoso, podéis añadir un poco de la nata montada a esta mezcla).
Extendemos una capa de nata por el exterior de la tarta, con una manga pastelera decoramos la parte superior, colocando las fresas enteras en medio, echamos un poco del almíbar del proceso anterior y dejamos enfriar en la nevera.
Cuanto más tiempo esté enfriando, más se integrará la mezcla del bizcocho con las fresas.
Ya podéis disfrutar de este postre!!!
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