Albóndigas de merluza y gambas

En el post de hoy, una receta para que los niños tomen pescado de una manera sana, sin espinas ni dramas, unas albóndigas de merluza y gambas. En este caso, he optado por unos filetes de merluza congelada, pero podéis usar cualquier tipo de pescado para hacerlas.

Hice  mucha cantidad, las congelé, y a la hora de comerlas de nuevo, estaban en su punto, así que os animo a cocinarlas y guardar para tenerlas para otro día.

INGREDIENTES:

500 grs de filetes de merluza sin piel (frescos o congelados).

300 grs de gambas o gambones 🦐.

1 cebolla 🧅.

1/2 diente de ajo 🧄.

1 rebanada de pan de molde .

1/2 vaso de leche 🥛.

1 copa de vino blanco.

Harina.

Aceite de oliva.

Sal y pimienta.

Para empezar, vamos a pelar los gambones, a los que retiraremos las cabezas, quitamos intestinos y reservamos limpios.

En una sartén con 2 cucharadas soperas de aceite sofreímos las cabezas de los gambones, añadimos la copa de vino blanco, la misma cantidad de agua y dejamos hervir durante 10 minutos. Después, colamos el líquido y reservamos.

En una trituradora o batidora echamos los filetes de merluza y las gambas hasta que quede picado (más o menos a vuestros gusto).

Usamos un bol grande donde incorporaremos el pescado, un huevo, una rebanada de pan de molde mojada en leche, sal y pimienta y mezclamos bien.

Formamos bolitas y rebozamos en harina (yo he usado harina de maíz).

En la misma sartén que hemos usado para hervir el caldo de gambones, echamos 5 cucharadas soperas de aceite de oliva, freímos las albóndigas y reservamos. 

Después picamos una cebolla muy finita y freímos en el mismo aceite hasta que quede transparente.

Para terminar, incorporamos el caldo al sofrito de cebolla, rectificamos de sal si hiciera falta y cuando empiece a hervir, añadimos las albóndigas que hemos frito.

Dejamos cocinar a fuego medio 10 minutos y ya podemos servir.

Como guarnición podemos preparar un arroz blanco y ya tenéis un plato de pescado sin espinas que además le encantará a los niños.