En el post de hoy, una crema, antes de que llegue el calor y los platos fríos. Esta receta es de mi madre, y es un plato que se come en casa desde siempre. No lleva mucho tiempo y su sabor es espectacular. Lo ideal es prepararla con pimientos asados al horno, pero con un bote de pimientos del piquillo sale genial. Los ingredientes son muy de andar por casa, así que os animo a prepararla.
Ingredientes:
4 pimientos rojos asados o un bote grande de pimientos del piquillo
1 cebolla
1 nuez de mantequilla
1 cucharada sopera de aceite de oliva
1 cucharadita de harina
3/4 de l. de caldo de pollo
100 grs nata liquida
Sal
Pimienta
Queso parmesano rallado
Para empezar, picamos la cebolla y los pimientos en tiras y ponemos en una olla la mantequilla y el aceite a calentar.
Incorporamos la cebolla y ponemos a fuego lento para que poche.
Una vez este tierna, añadimos los pimientos, rehogamos y añadimos la cucharada de harina, rehogamos y añadimos el caldo de pollo. Salpimentamos.
Dejamos hervir aproximadamente 10 minutos y pasado ese tiempo, batimos y colamos (por si quedasen pepitas). Servimos con un chorrito de nata líquida y queso parmesano rallado.
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